España es el segundo país europeo que más marcas blancas consume

España fue uno de los países de Europa que más tiempo tardó en adoptar las marcas blancas, y sin embargo, a partir de situaciones como la crisis, éstas han conseguido conquistarnos, como demuestran los últimos estudios al respecto.

Estos productos, que son realizados por fabricantes invisibles y que generalmente se comercializan bajo una marca del mismo nombre que el supermercado o tienda que los distribuye, suelen destacarse por sus precios inferiores al promedio, como por la garantía de la calidad por parte del vendedor.

Las investigaciones más recientes explican que el 40% de los productos que consumen los españoles pertenecen a las marcas blancas, lo que pone a España en un segundo puesto únicamente por detrás del Reino Unido.

Pablo Contreras, profesor de EAE Business School y autor de uno de estos análisis, ha señalado al respecto que el crecimiento de las marcas blancas se debe, en parte, a que «ya nadie cree que sean artículos para familias con bajo poder adquisitivo. Al contrario, se consideran una compra inteligente».

En cuanto a la diferencia de precio que marcan respecto de las primeras marcas estos productos, y aunque esto varía a medida que pasan los años, ahora mismo se establece en aproximadamente un 25% o 30%, por lo que representan un ahorro importante, sobre todo para las familias.

Además, se trata de artículos que permiten reducir costes en toda la cadena productiva, ya que se producen en volúmenes gigantescos, de manera que resultan beneficiosos también en cuestión de transporte y logística.

A día de hoy, son muchas las compañías que comercializan productos de marcas blancas en España, a las cuales se han sumado gigantes como Amazon últimamente.