El 10% de la comida desperdiciada en Europa, culpa de las fechas

Muchas veces hemos hablado aquí acerca de Too Good To Go y su lucha contra el desperdicio de alimentos, que se produce por toneladas cada año en el continente. Concretamente, de acuerdo a la Comisión Europea, cada temporada se echan a perder aproximadamente 88 millones de toneladas. Pero lo peor es cuánto podemos evitar casi sin esfuerzo.

Justamente de ello va una de las últimas publicaciones que la propia gente de Too Good To Go ha hecho en su blog oficial, donde explican que la confusión entre la fecha de consumo preferente y la fecha de caducidad es la causante de alrededor del 10% de la comida que termina en la basura.

Por la gravedad de esta situación, y por lo poco que deberíamos hacer para revertirla, es que han intentando explicar cuáles son las diferencias entre ambos conceptos.

«En primer lugar, la fecha de caducidad es aquella a partir de la cual el fabricante ya no puede garantizar la seguridad alimentaria de los productos y NO se deben consumir si se quieren evitar problemas mayores. Esta fecha de caducidad se aplica a las etiquetas de productos perecederos como son la carne o el pescado fresco«, detallan antes que nada.

«La fecha de consumo preferente indica la fecha hasta la que el alimento tendrá la calidad esperada. Una vez pasada esta fecha de consumo preferente, el alimento sigue siendo seguro, por lo que los productos con fecha de consumo preferente pueden seguir en buen estado, una vez esta haya pasado. Cuando los productos han superado esa fecha, lo que ocurre es que se ven alteradas algunas de sus propiedades como el aroma, la textura o el sabor, pero aún pueden consumirse sin riesgo alguno siempre y cuando se hayan respetado las instrucciones de conservación«, aclaran en segunda instancia, para evitar errores.

Con ello, desde Too Good To Go alertan que todavía son muchos los consumidores que no saben leer correctamente estas fechas, no sólo poniendo en riesgo su salud sino, al mismo tiempo, desperdiciando alimentos 100% comestibles.

Ahora, por suerte, ya lo sabes.