La cesta de la compra contra el desperdicio alimentario

El desperdicio alimenticio es uno de los grandes problemas que produce el consumidor. Un asunto que no solo afecta al bolsillo de los clientes, si no que también afecta al planeta. Y es que, alimentarse es una necesidad básica del ser humano. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), una familia de cuatro miembros gasta de media 381,5 euros mensuales en alimentos. Un gasto muy importante dentro de la economía media.

El problema es que España vive en una situación de inflación, lo que hace que el precio de los alimentos haya subido y con ello, la lista de la compra. A su vez, este hecho provoca que cada alimento despilfarrado, suponga una pérdida de dinero importante para las familias. Por ello, es importante hacer un ejercicio de concienciación y comprar solo lo necesario para no solo ayudar en el menor desperdició de alimentos, si no también a la economía domestica.

Según el Informe del Desperdicio Alimentario llevado a cabo por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en España cada habitante vertió al contenedor una media de 28 kilos de alimentos. Un dato preocupante que, aun así, es menor que en el año 2020.

Este desperdicio de alimentos se divide entre los hogares domésticos, restaurantes y hoteles. En el hogar se debe a una mala planificación, mientras que en los otros lugares, se debe a la compra masiva de alimentos, que unida a una mala planificación crea residuos alimenticios

Luchar contra el derroche

Para intentar acabar con este problema, existen una serie de medidas que se pueden tomar:

• Hacer una planificación semanal de alimentos.
• No cocinar productos en exceso.
• Conservar de manera adecuada los alimentos que tenemos en el hogar.
• Comprar productos de temporada.
• Aprovechar todos los productos.
• Comprar frutas y hortalizas.

Todos estos trucos pueden ayudar a derrochar menos alimentos y cuidar el medio ambiente.