La alimentación, clave en los hospitales

La alimentación es uno de los elementos más importantes para tener una vida saludable. Consumir una dieta equilibrada, no solo da lugar a un físico envidiable, si no que, gracias a esto, se puede superar una enfermedad. Lo que quiere decir que es muy bueno para la salud.

Los hospitales están llenos de gente mayor que sufren enfermedades de varios tipos. Para ellos, es muy importante la alimentación, debido a que necesitan de la fuerza que les produce la comida para enfrentar dicho problema. Para las personas mayores de 65 años, una buena alimentación supone un envejecimiento saludable y activo. Mientras que, una mala alimentación puede provocar el desarrollo de otras enfermedades y un envejecimiento problemático.

Uno de los grandes problemas que hay en los centros de salud es la la alimentación deficiente. Un mal estado nutricional de los pacientes puede dar lugar a un mayor tiempo de ingreso, entre otros muchos problemas. Se estima que un 33,3% de las personas mayores de 65 años ingresadas en hospitales están desnutridas. Un dato difícil de asimilar.

Uno de los principales problemas de esta desnutrición es la dificultad de las personas mayores para tragar. Esto se conoce como deglución, y a veces, pasa inadvertido. Es importante llevar un control sobre ello, ya que en muchos casos la dieta de los centros no es blanda, lo que produce problemas alimenticios. Se estima que un 80% de los pacientes no están diagnosticados y no son tratados obre este problema.

Soluciones a la desnutrición

Para luchar contra la desnutrición existen una serie de acciones que de realizar rutinariamente acabarían con el problema:

• Llevar un control diario de las dietas.
• Realizar pruebas alimentarias a los pacientes.
• Realizar una encuesta alimentaria al paciente.
• Contratar la figura de un nutricionista.
• Un mayor control de los alimentos.
• Variar la dieta de alimentos duros y blandos.

Estas ideas pueden ser importantes a la hora de mejorar la alimentación dentro de los hospitales.