Aumento de pecho, una operación estética en auge

El aumento de pecho es la operación estética más demandada entre las mujeres. Esta intervención, se realiza con implantes que pueden colocarse bajo un músculo del pecho o en uno de ellos. La incisión se puede colocar en la axila, en la areola o en el pliegue inferior de la mama.

Muchas mujeres sienten que su pecho es demasiado pequeño, lo que deriva en inseguridades y complejos. Otras, se plantean el aumento de pecho después de etapas en las que el cuerpo cambia como puede ser el embarazo. También existen correcciones de asimetría de los senos e, incluso, algunas mujeres prefieren orientar la intervención a una reconstrucción de mamas tras una mastectomía.

Lo más interesante del aumento de pecho en la actualidad es que cada vez se emplean técnicas más conservadoras. Este tipo de operación es un procedimiento mínimamente invasivo, en el cual se realizan incisiones de apenas tres centímetros de longitud. Para aumentos de pecho en los cuales la incisión se realiza en la axila, puede utilizarse un endoscopio durante el procedimiento.

Los implantes mamarios ofrecidos por las clínicas estéticas especializadas en el aumento de pecho son materiales totalmente adaptados al organismo, que aportan un aspecto totalmente natural y ofrecen una gran seguridad. Ante todo, para someterse a una mamoplastia, se debe escoger profesionales que aporten la mayor confianza posible y ofrezcan garantías.

La operación de aumento de pecho no es dolorosa ya que los profesionales aplican anestesia antes de la intervención. El postoperatorio tampoco suele ser doloroso. Al principio, puede ser algo incómodo al tener que limitar una serie de movimientos que implican dormir boca arriba y llevar un sujetador ortopédico durante un mes (que no incluya aros). La recuperación de la mamoplastia no suele ser complicada, siempre que se cumplan los consejos e indicaciones del cirujano plástico.

Hasta ahora, el aumento de senos es una de las operaciones estéticas más demandadas en nuestro país, especialmente por las mujeres de alrededor de 35 años. Sin embargo, no hay edad para operarse el pecho. Algunas mujeres deciden hacerlo a los 20 años y otras a más de 40. Lo importante es que el desarrollo tras la pubertad haya finalizado.