La dieta mediterránea mejora la salud psicológica, el peso y el riesgo cardiovascular

La dieta mediterránea nunca ha pasado de moda y tiene motivos para seguir llenando las mesas de muchos hogares españoles.

Tenemos la suerte de contar con esta valiosa herencia cultural que recoge recetas, formas de cocinar, celebraciones, costumbres, actividades y productos típicos.

Aunque a veces nos olvidamos de sus virtudes, cada vez son más las voces que hablan sobre sus beneficios y más abundantes las evidencias científicas que respaldan esta pauta nutricional rica y saludable.

Así lo reconoció y celebró la UNESCO inscribiendo la Dieta Mediterránea como uno de los elementos de la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

Por si hay algún despistado, vamos a recordar las bases de esta dieta con el sencillo decálogo de la Fundación Dieta Mediterránea:

1. Utilizar el aceite de oliva como principal grasa de adición.
   Es el aceite más utilizado en la cocina mediterránea. Es un alimento rico en vitamina E, beta-carotenos y ácidos grasos monoinsaturados que le confieren propiedades cardioprotectoras.
2. Consumir frutas, verduras, legumbres, champiñones y frutos secos en abundancia.
3. El pan y los alimentos procedentes de cereales (pasta y arroz, especialmente integrales) deberían formar parte de la alimentación diaria
4. Los alimentos poco procesados, frescos y de temporada son los más adecuados.
5. Consumir diariamente productos lácteos, principalmente yogurt y quesos.
6. La carne roja debe consumirse con moderación.
7. Consumir pescado en abundancia.
8. Los dulces deberían consumirse solo de forma ocasional.
9. El agua es la bebida por excelencia del Mediterráneo. El vino debe tomarse con moderación y durante las comidas.
10. Realizar actividad física todos los días es tan importante como comer adecuadamente.

Vayamos ahora a por sus beneficios.

Mejora de la salud psicológica

Un estudio de los investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) y el Parc Sanitari Sant Joan de Déu (PSSJD),  publicado en la revista ‘Psychology and Health‘, ha mostrado que la adherencia a la dieta mediterránea también es positiva en el bienestar psicológico.

Los resultados de este estudio, en el que 2.397 participantes que fueron entrevistados en todo el territorio español, muestran que aquellas personas que la incluyen entre sus hábitos también presentan una mayor satisfacción con la vida, y experimentan menos emociones negativas.

Reducción del peso y mejora cardiovascular

La Universidad de Málaga (UMA), a través del grupo de I+D+i en Medicina Deportiva del Ibima, participa en el proyecto nacional ‘Predimed-Plus’, que estudia los beneficios de la dieta mediterránea para prevenir enfermedades cardiovasculares como el ictus o el infarto.

Esta investigación es la segunda fase del proyecto inicial ‘Predimed‘ -Prevención con Dieta Mediterránea-. A partir del análisis de 7.447 personas mayores con alto riesgo cardiovascular de toda España, se evidenció que los episodios relacionados con enfermedades del corazón disminuían hasta en un 30 por ciento gracias a esta pauta de alimentación.

Sin duda, la alimentación saludable de la dieta mediterránea nos proporciona aporta numerosos beneficios para la salud y nos permite disfrutar de sabrosos platos.